Te damos los consejos para el cuidado de tus gafas graduadas
Al limpiar y cuidar gafas, es fácil cometer algunos errores que pueden afectar la claridad de las lentes y la vida útil de la montura. Aquí tienes una lista de errores comunes:
1. Limpiar con la ropa:
- Problema: La tela de la ropa, aunque parezca suave, puede tener partículas de polvo que arañan las lentes.
- Consejo: Usa un paño de microfibra diseñado para gafas, que es suave y no daña las lentes.
2. Usar productos inadecuados:
- Problema: Limpiar las gafas con limpiadores de ventanas, limpiadores no adecuados de baja calidad, alcohol o productos químicos agresivos puede dañar el recubrimiento antirreflectante de las lentes.
- Consejo: Utiliza líquidos específicos de óptica para limpiar gafas o agua y jabón neutro.
3. No enjuagar antes de limpiar:
- Problema: Limpiar las gafas sin enjuagarlas primero puede arrastrar partículas de polvo o suciedad, lo que provoca arañazos.
- Consejo: Enjuaga las gafas con agua tibia antes de pasar el paño para eliminar la suciedad suelta.
4. Usar toallas de papel o pañuelos:
- Problema: Aunque parecen suaves, estos materiales son más abrasivos de lo que parecen y pueden dañar las lentes si se usan en seco.
- Consejo: Solo usa paños de microfibra o toallitas especialmente diseñadas para gafas.
5. Exponerlas a temperaturas extremas:
- Problema: Dejar las gafas en el coche bajo el sol o exponerlas a temperaturas muy altas puede deformar la montura o dañar los recubrimientos de las lentes.
- Consejo: Evita exponerlas al calor intenso, como la guantera del coche o superficies calientes, y cuidado con los hornos y cocina, y en verano cuando vayas a la piscina guárdalas donde no les de el sol, y que no entren en contacto con el cloro ni sal.
6. Guardarlas sin estuche
- Problema: Colocar las gafas directamente en un bolso, bolsillo o sobre una superficie puede causar arañazos o daños en las monturas. Y eso ocurre con una sola vez que lo hagas, luego no hay marcha atrás.
- Consejo: Siempre guárdalas en su estuche protector cuando no las uses.
7. Usarlas en la cabeza
- Problema: Usar las gafas en la cabeza como si fueran una diadema puede aflojar las patillas o desalinear las monturas, y sufrir caidas inesperadas.
- Consejo: Evita este hábito para preservar la forma correcta de las gafas.
8. Limpiar en seco
- Problema: Frotar las lentes sin un líquido limpiador puede causar microabrasiones, que a largo plazo deterioran la calidad óptica.
- Consejo: Siempre usa un líquido limpiador o agua para reducir la fricción al limpiar las lentes.
9. No ajustar las gafas de manera profesional
- Problema: Ajustar las gafas tú mismo puede provocar que las monturas se desalineen o se rompan.
- Consejo: Si las gafas están flojas o desalineadas, llévalas a un profesional óptico para que las ajuste adecuadamente.
10. No limpiarlas regularmente
- Problema: La suciedad acumulada puede afectar la visibilidad y dañar los recubrimientos de las lentes con el tiempo.
- Consejo: Limpia las gafas de forma regular para mantener la claridad y prevenir daños a largo plazo. Y no olvides la visita periódica al profesional para el chequeo de la gafa.
11. Cuidado con las lacas del pelo y cremas faciales:
- Problema: La laca contiene productos químicos que, al entrar en contacto con las lentes, pueden dejar residuos pegajosos y difíciles de eliminar. Esto puede disminuir la claridad de las lentes y hacer que se ensucien más rápidamente. Si tus gafas tienen recubrimientos especiales (como antirreflectante o filtro UV), la laca puede dañar o deteriorar estas capas protectoras, haciendo que pierdan eficacia. La laca también puede afectar los materiales de la montura, especialmente si son de plástico o metal pintado. Con el tiempo, estos productos químicos pueden hacer que se debiliten, pierdan brillo o se degraden.
- Consejo: Quitarse las gafas antes de aplicar productos y asegurarse que no entran en contacto con la gafa.
12. Cuidado al abrir el horno con las gafas puestas:
- Problema: Emite mucho vapor a alta temperatura y las puede deteriorar, llegando a quebrar el antirreflejante.
- Consejo: Quitarse las gafas o retirarse más del horno al abrirlo
13. Piscinas y playa:
- Problema: El agua tratada o el agua del mar es abrasiva y puede deteriorar tanto las lentes como la montura. Igualmente, cuando estamos es esas situaciones, entran muchas mas partículas abrasivas en las esquinas de las gafas y hacen q al intentar limpiarlas las rayemos sin darnos cuenta.
- Consejo: Intentar no bañarse con ellas, ni que le caiga agua. Y cuando vayamos a limpiarlas, asegurarnos de que no queda ninguna partícula abrasiva tipo arena, etc…
Cuidar las gafas adecuadamente no solo te garantiza una mejor visión, sino que también prolonga su vida útil y mantiene su apariencia en buen estado. Una revisión periódica de las gafas por parte de un profesional óptico hará que duren más, y en mejores condiciones.
Y la «pregunta del millón»: ¿Se pueden arreglar las lentes rayadas?: NO. No se pueden pulir ya que se deterioran los tratamientos, y se perdería la calidad óptica del cristal y su graduación sería incorrecta. Por eso no descuides en su cuidado, por que un deterioro en las lentes te supone cambiarlas de nuevo.
Recuerda, no olvides realizarte revisiones periódicas, es por tu salud visual. Pide cita al 91 8479474 en nuestro centro en Soto del Real (Madrid), o en el enlace de WhatsApp que aparece a la derecha.